Anfiteatro de Orfeo

En las inmediaciones de la Puerta de Sevilla, se edificó, a principios del S. XVI, el matadero municipal. Este edificio muestra una clara composición formal, organizado en torno a un patio, con galerías, y que probablemente funcionaba casi siempre en espacios exteriores.

ANFITEATRO DE ORFEO fue la propuesta presentada para el Concurso para la redacción de proyectos, a nivel de anteproyecto, para la construcción del complejo cultural para la música y el patrimonio en los antiguos mataderos de Carmona y la adecuación de sus entornos urbanos.

La arquitectura ha de reconocer el valor de las aportaciones pasadas, recuperarlas e incorporarlas como parte activa y fundamental de nuestros espacios cotidianos.

La propuesta pretende dotar de un nuevo espacio integrado en la trama urbana, junto a la Puerta de Sevilla, dada la gran relevancia que tiene este punto en la ciudad, tanto como elemento patrimonial como nodo de comunicaciones y de acceso al perímetro de las antiguas murallas. Para ello, se plantean unas terrazas que, a modo de plaza, sirven de mirador hacia el paisaje y dotan de un amplio espacio público abierto a la ciudad.

El valor patrimonial del matadero viejo es más que su belleza material, también lo es su composición espacial. Esta idea permite recuperar unos espacios que se organizan entorno a un patio, que se convierte en espacio principal de la planta baja y extensión de los propios usos que se abren a él.

El material de ladrillo visto y teja que se recupera en el matadero viejo tiene su contrapeso en la utilización de la piedra caliza de color albero, tan característica en la Cornisa de los Alcores. Se consigue una sensación de pesadez y conexión con el entorno, al tiempo que el contraste es atractivo entre ambas arquitecturas. Pasado y presente se funden.

Las piezas de planta alta se configuran como naves que dirigen las miradas a la campiña carmonense, al tiempo que desde el interior del centro cultural evocan a la emoción que antaño se había de vivir en las horas de trabajo, y canalizarla al presente mediante una arquitectura que se convierte en inspiración para la música y el patrimonio.

El sistema constructivo, responde de manera complementaria en planta baja y en planta primera. La planta baja combina elementos de vidrio con protección solar (vuelos y lamas), con materiales pesados como la piedra caliza o el ladrillo visto. En planta primera, se emplean paneles de aluminio lacados en color rojo rubí, lo que, por un lado, ofrece la imagen y sensación del color que transmite inspiración y energía a los alumnos, mientras que, por otro lado, la fabricación en taller permite mayor control de calidad y mejores prestaciones tanto de aislamiento como de eficiencia energética.

En su conjunto, la propuesta presentada pretende consolidar y mostrar unidad a un espacio destinado a convertirse en referente de la ciudad de Carmona. Anfiteatro de Orfeo une el patrimonio, el paisaje y la modernidad a través de una arquitectura al servicio de la ciudad y las personas.